jueves, 19 de agosto de 2010

Restaurant Miquel (bis)

Esta es la segunda ocasión en la que escribo sobre este bonito restaurante situado frente al paseo marítimo de Cambrils y, a diferencia de la primera, los elogios a su cocina no se circunscribirán casi exclusivamente a su arroz de galeras, el cual, afortunadamente, sigue rayando la perfección.

Restaurante Miquel al que, vista la relajación –para no escribir declive- que están padeciendo las propuestas gastronómicas de Acuamar y Joan Gatell, los dos restaurantes que delimitan su campo de juego, y de seguir completando su carta con platos capaces de soportar –que ya es mucho- la comparación con sus arroces, le auguró que se llevará a la boca, y lo hará merecidamente, un buen pedazo del pastel de la cocina de mercado del literal tarraconense.


La comida del pasado domingo en este restaurante familiar –madre, hijo y nuera son los que se lo guisan, lo de comérselo lo reservan para sus comensales- la compusieron:

Unas notables cigalitas al “aglio e olio” y un carpaccio de gamba roja.


El buque insignia del restaurante, esto es, su arroz de galeras: siempre en su punto, de sabor intenso y profundo y, por sorprendente que parezca, de fácil digestión.

Una lubina al horno que, sin lugar a dudas, fue lo más flojo del ágape. Seguro que influyó que la precediese un plato tan bueno, pero su punto de cocción excesivo y sus paupérrimas dimensiones tampoco dibujaban el mejor cartel de presentación.

En cuanto a los postres, dado que era un día de celebración, solicitamos a Miquel, el hijo y cocinero, que preparase un pastel de cumpleaños. Amablemente accedió y nos deleitó con un excelente pastel (buenísimo el “pa de pesic”) de nata (sin azúcar), trufa y yema quemada.

A pesar del pastel, el petit four de la casa, un bizcocho con un punto subido de anís, afortunadamente acudió fiel a su cita con los cafés.

En definitiva, el restaurante Miquel está en disposición de dar la alternativa a ciertas propuestas gastronómicas de Cambrils algo caducas, eso sí, se encuentra también el momento más difícil y delicado. Utilizando mis tan queridos símiles deportivos, tiene que cerrar el partido de tenis o, de decantarme por un símil, seguro, controvertido, tienen que asestar la estocada definitiva. Apostar por productos excelentes en vez de notables y mejorar detalles como la cristalería, impropia para servir según que vinos, o el pan el aceite y la sal seguro que le aportarán el impulso definitivo.

Vino: Botani 2008 (Moscatel de Alejandría), Bodegas Jorge Ordóñez y Can Blau 2007 (Garnacha, Syrah, Cariñena), Montsant.

Precio: 55 €
Calificación: 13,5/20

Indicado: Disfrutar de la mejor cocina de mercado de Cambrils y enamorarse de ese crustáceo durante tantos años denostado que es la galera.

Contraindicado: Personas con poca paciencia, pues los tiempos del restaurante son una de las facetas en las que, según parámetros ESO, necesitan mejorar.

Avinguda Diputació 3, Cambrils (Tarragona)
977 36 03 57

1 comentario:

  1. Segon comentari aquí... Mai he entrat al Restaurant Miquel. I en canvi soc client del Germans Miquel's que ja sé no tenen res a veure.
    Germans Miquel's, suposo que si voltes per Cambrils, ja el coneixes, és un lloc on anem sovint. L'ambient és senzill, el propietari (quan el comences a coneixer) entranyable i els seus arrossos caldosos i la seva mariscada (per encèrrec) de força nivell. Al meu blog comento aquest restaurant.

    ResponderEliminar