lunes, 29 de agosto de 2011

Boca Grande

Acaba de abrir (dos semanas se cuentan) sus fauces en una de las calles de Barcelona con mayor densidad de restaurantes y, por su filosofía y recursos y bagaje de sus propietarios –es siempre un ejercicio interesante e ilustrador el descubrir los nombres y apellidos de quiénes, a la postre, mueven los hilos, en el caso del restaurante Boca Grande, hablamos de Joan Solé (Big Fish) y Lluis Canadell (Creps de Barcelona)- todo parece apuntar que, por fin, la hegemonía del todopoderoso Grupo Tragaluz en el pasaje de la Concepció puede verse puesta en entredicho.

Lo dicho…

Bagaje, como el conocimiento, adquirido en sus anteriores y más que exitosas –haciendo el arriesgado, tal vez temerario, paralelismo de éxito y favor del público- aventuras, de las apetencias del público barcelonés.

Recursos, que han posibilitado que el restaurante Boca Grande se erija en una de las calles más selectas y, en consecuencia, caras de Barcelona y que pueda presumir de una más que cuidada decoración que responde a la firma de Lázaro Rosa Violán.



Filosofía, que corresponde inculcarla –no le costará mucho- a los suyos al jefe de cocina del restaurante Boca Grande, esto es, a Xavi Tranque (The Mirror, Palau de la Música…) y que se asemeja bastante –un combate justo exige mismas armas- a la que blanden la mayoría de los restaurantes del Grupo Tragaluz: BONITO, bueno y… se acabó.

Y a fe de Dios que bonito lo es el restaurante Boca Grande. Algo “macro” y recargado para mi gusto, en particular su local de copas alojado en la planta superior del restaurante y que responde al nombre de Boca Chica, y con ciertas lagunas de iluminación –y no lo digo para excusarme por unas fotos mejorables-, pero bonito.



Lo de bueno, bueno… Sin duda lo intentan, y prueba de ello son una carta con creaciones más que sugerentes y la utilización de productos, como mínimo en todos los platos que probé, de una notable calidad (morro de bacalao, pescado salvaje, pan de la panadería Crustó…). No obstante, las cocciones: pasadísimas, y unos postres –junto con el mío probé los de mis dos acompañantes- mediocres me obligan a pronunciar lo de bueno “con la boca pequeña” –ya me perdonaréis, pero era demasiado fácil este juego de palabras-.

Y lo que no está, no debe estar, pues la relación calidad-precio del restaurante Boca Grande, siendo particularmente sangrantes los capítulos de los postres y, especialmente, el de los vinos –referencias multiplicadas hasta por cuatro-, es muy mejorable.

Y cuanto he dejado escrito, con base en:

Unas notables anchoas con pan con tomate de la panadería Crustó.

Unos excelentes “buñuelos” de bacalao. Sin duda, lo mejor de la noche, aunque de buñuelos no tenían nada, pues era morro de bacalao en tempura.

Unos medallones de pulpo con panceta y cremosos de patata que, seguro, hubiese hecho honor a su sugerente enunciado si la textura durísima del pulpo, por una cocción excesiva, no hubiese intervenido en la ecuación.

Un rodaballo al horno de una notable calidad, aunque, dicho sea todo, dado un paso por el horno injustificada e incomprensiblemente largo se requerían verdaderos esfuerzos para apreciarla.

Y un anodino –como eufemismo de los peores que he comido últimamente- coulant con helado de avellana –sin duda, lo mejor del postre, tanto en valor relativo como absoluto- y caramelo.

En definitiva, un restaurante que, seguro, a muchos convencerá y al que le auguro un próspero futuro pero que, a un servidor, al que hay que convencerlo, con hechos y no palabras, por la boca y no por la vista poco tiene a ofrecer.

Bodega: Brunus Rosat 2010 (Garnacha). Portal del Montsant. DO Monsant

Precio: 40 € (comida) + 26 € (botella de Brunus: ¡Indecente!).

En pocas palabras: Por la boca vive y puede que muera este pez.

Indicado: Para los que el marco es tanto o más que la comida.

Contraindicado: Para los que tiene claro que comer, ir al teatro o a un club son actividades que ni juntas ni revueltas, mejor una detrás de la otra.

Passatge de la Concepció 12, Barcelona
934 675 149

17 comentarios:

  1. Amb el "indicado/contraindicado", ho has dit tot.. :). Tampoc la crítica del Philippe era massa generosa..

    I això que semblava que la ma de Big Fish, donava més esperances.

    :(

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  2. Soy de los del grupo de "indicado": realmente me convencen los restaurantes por la vista, por la decoración y la terraza (eso sí, si se quedan en eso no repito), pero ante la foto del pobre rodaballo y tus comentarios sobre el pulpo y el coulant (sin duda sería lo que hubiera elegido de no haber sido advertida) creo que me centraré en probar los coktails y le daré un tiempo de rodaje a la cocina.

    Gracias!

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  3. Hola Ricard,

    No tenía cap dubte que aquesta no era boca per a tu.

    Salutacions,

    eduard

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  4. Muy bien hecho harás, Andrea, pues, tal vez, algo de rodaje es lo que les falta.

    Un saludo,

    eduard

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  5. Hola Eduard

    Esperaba tu crónica y veo que tu opinión es parecida a la que comenté ayer.

    Además no me gustó nada el servicio , demasiado " casual" , o familiar . Llámame antigua pero no me gusta que lo primero que me digan cuando vienen a tomar nota sea " ¡¡ Hola Chicos!!,
    ni que pasen 5 / 6 personas por la mesa a ver que tal , o a servir vino cuando otra persona acaba de llenar la copa ,(imagino que en el training de formación les han dicho que estuvieran muy pendientes de los clientes , pero no es natural). Y para colmo cuando intentaba subir al Boca-chica por el ascensor como me habían indicado , y no funcionaba , el portero me dice " sube por las escaleras , asi haces piernas " , pues no se a que viene tanta " confianza".

    Si a eso añadimos que leí la carta ayudándome de la vela de la mesa , que en mitad del servicio se fue la luz , que la mitad de los mejillones los dejé porque estaban cerrados , que las vieiras eran insulsas , el pescadito frito si era muy bueno y la cecina correcta , no me llamó la atención ningún postre , y según leo no me perdí nada, y la cuenta desmesurada por esos 4 platos , un vichy y un sencillo vino blanco , pues no se ...( El pan de Crustó bueno , pero lo compro al lado de casa cada día).

    No entiendo porque los clientes debemos sufrir los " rodajes" , i más cuando si detras de un proyecto hay profesionales que ya poseen negocios de envergadura.

    Cuando visité por primera vez Casa Paloma , hacía 3 semanas escasas que habían abierto y todo fue excelente . . Para mi es el ejemplo auna bonito local con buena comida que le ha convertido en un éxito.

    Siento haberme extendido , pero salí indignada como hacía tiempo no me pasaba.

    Un saludo

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  6. No te disculpes apreciado Anónimo, pues tu comentario es un magnífico resumen de lo que es Boca Grande.

    Comentario en el que además incides en una faceta que tal vez no he denunciado suficiente en mi crónica: un servicio muy, pero que muy mejorable.

    Y, sin duda, Casa Paloma es un gran, uno de los mejores ejemplos de BONITO y BUENO. Lo de barato..., no se puede exigir la perfección.

    Un saludo,

    eduard

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  7. Soy una fan de Lázaro, el local realmente es muy bonito, pero por lo que veo hay que darle un tiempo a la cocina, aunque es verdad que ciertos restaurantes con las personas que tienen detrás y los precios, no deberían tener estas dificultades en sus primeras semanas.
    Yo creo que el Boca Grande nunca será un gran restaurante, yo lo veo como un bar de copas para gente de 30 años para arriba, que a Barcelona buena falta le hacía, after work, bailar (creo que también tiene una zona) y picar algo antes, sin muchas pretensiones.

    El Casa Paloma es sin duda un buen restaurante, también con interiorismo de Lázaro.

    Un saludo,

    Mónica

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  8. Sin duda, Mónica, todo restaurante se merece un vacatio legis, no obstante, algunos errores fueron de tanta profundidad que no se si el tiempo los sanará.

    Y respecto tu admirado interiorista, comentarte que, a pesar de que la belleza del local es comparable a otro de sus proyectos (Casa Paloma), los materiales utilizados en Boca Grande son de muy inferior calidad, particularmente las mesas.

    Un saludo,

    eduard

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  9. Estos restaurantes que antes de abrirlos ya les dedican un par de páginas en la Vanguardia, hay que empezar a sospechar de ellos...

    Muy bonitos para las revistas de moda....pero nada mas ¡¡¡¡

    No pienso perder mi tiempo en probar este tipo de restaurantes insustanciales, excepto para los pijos de medio pelo.

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  10. Sin duda, de un restaurante debería ser noticiable, principalmente, su propuesta gastronómica. No obstante, como apuntas, y sucede con Boca Grande, no siempre es así.

    A pesar de ello, creo que la vacatio legis ya apuntada se la merece.

    Un saludo,

    eduard

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  11. Os quejáis sin mucho motivo. El restaurante ni siquiera está inaugurado. Estuve el viernes. Todo estuvo buenísimo y bien presentado. Los humanos, comemos con todos los sentidos: el restaurante es un regalo para la vista, un lugar con "vidilla" y la comida, de calidad. Tiene una buena carta de vinos y una coctelería espectacular para acabar la noche...Dadle tiempo. El comentario sobre las vieiras insulsas: cuántas veces has comido vieiras? Porque yo he veraneado en Galicia y no las he comido mejores! Y lo mismo digo del pulpo. El único fallo: el tiempo de espera entre plato y plato, pero el sitio estaba "a tope"! Los postres, buenísimos! Si estoy, sin embargo, de acuerdo con la presentación de las hamburguesas. Me encontré como en mi casa! Vuelvo fijo!

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  12. Que tiene que ver si esta inaugurado o no ? La comida que te sirven te la regalan acaso ?

    Las pruebas en casa y con gaseosa, si acaso...
    Hay varios casos de locales de apertura reciente que estuvieron trabajando con amigos, sin presentar factura, para detectar los posibles fallos, asi a la mente me vienen al caso, el Velodromo, el Tickets. En Casa Paloma, funciono como un reloj durante el primer medio año, sin haber inauguración por medio.

    En fin...

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  13. Apreciado Anónimo,

    El restaurante puede que no esté inaugurado oficialmente, pero desde que decide abrir sus puertas y cobrar por lo que sirve queda expuesto al juicio popular, a las opiniones, todas ellas valiosas, de los que allí han comido.

    Y respecto la calidad de su pulpo, un enamorado y conocedor de Galicia, te dice que en casi cualquier restaurante de todos sus bellos pueblos lo preparan mejor.

    Y, realmente, debo confesar que me cuesta entender como puedes ensalzar su carta de vinos y postres: a mi entender, lo peor del restaurante.

    Un saludo,

    eduard

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  14. Si , las vieiras que yo comí eran insulsas.
    Las mejores que conservo en mi memoria son de Can Bosch en Cambrils
    Por suerte no a todos nos gusta lo mismo, sino unos locales estarían llenos y otros totalmente vacíos.

    Que es un restaurante inaugurado ? Uno que ha hecho fiesta de inauguración ? O uno que ha abierto puertas y te cobra por lo que comes ? Como bien apunta un comentario hay restaurantes que pasan el filtro de prueba con amigos y conocidos .

    No he querido molestar a nadie con mi opinión , entiendo que cada uno tenemos nuestro criterio y preferencias. El mio para valorar un restaurante es la suma de su comida , carta de vinos , servicio y el espacio.

    Un saludo

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  15. Sin duda, apreciado Anónimo, las de Can Bosch también ocupan un lugar privilegiado en mi imaginario gastronómico.

    Y, realmente, me es imposible no suscribir el resto de tu comentario.

    Un saludo,

    eduard

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  16. A pesar de tu comentario, me pudo la curiosidad y ayer me deje caer por Boca Grande. Mas o menos lo que tu relatas y yo ya imaginaba. Un sitio muy bien decorado, con un tipo de clientela que va a esos sitios a ver y ser visto, varias caras conocidas y a reventar...
    Comi en la barra,(nunca en unos taburetes mas incomodos¡¡¡). De la comida poco que decir, unos ostrones correctos, un cebiche que mi compañera no terminó y una merluza a la plancha buena. Desde la barra, a veces se observan detalles...que este caso encontré poco edificantes y que si repiten cuestan muy caros para los que han invertido en este negocio.

    Eso si, buenas copas, en el Boca Chica, con un barman, viejo conocido que oficiaba hasta hace poco en el Gimlet de Santaló.

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  17. Tu, como Santo Tomás, Bernie.

    Sin duda, hoy es más un escaparate, muy bonito, eso sí, que un comedor -en la acepción más romántica de la palabra-.

    Un saludo,

    eduard

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